¿Qué es la Terapia Existencial?
La terapia existencial es un enfoque filosófico de la psicoterapia que explora aspectos fundamentales de la existencia humana, como la libertad, la responsabilidad, el sentido de la vida y la inevitabilidad de la muerte. Basada en las ideas de filósofos existencialistas como Søren Kierkegaard, Friedrich Nietzsche, Martin Heidegger y Jean-Paul Sartre, esta terapia pone el foco en la autoexploración y el crecimiento personal.
En la terapia existencial, el terapeuta ayuda al paciente a examinar sus experiencias subjetivas y a enfrentarse a cuestiones fundamentales de la existencia, como:
- "¿Quién soy?"
- "¿Cuál es el sentido de la vida?"
- "¿Cómo puedo encontrar propósito y satisfacción?"
Más que ofrecer soluciones concretas o técnicas específicas, la terapia existencial busca que el paciente tome conciencia de sus valores, creencias y decisiones, fomentando su responsabilidad personal y la capacidad de tomar decisiones auténticas. Se centra en la autoconciencia, la libertad de elección y la creación de significado en la vida.
Este enfoque es especialmente útil para quienes atraviesan crisis de identidad, sienten ansiedad existencial o buscan un sentido más profundo en sus vidas. La terapia existencial respeta la individualidad de cada persona y adopta una perspectiva humanista que coloca al paciente en el centro de su propio proceso.
¿Qué problemas psicológicos puede abordar la Terapia Existencial?
La terapia existencial no está orientada a tratar síntomas específicos, sino a ayudar a las personas a explorar su identidad, propósito y mundo interno. Sin embargo, también puede complementar otros enfoques terapéuticos en el tratamiento de distintos problemas psicológicos. Entre las preocupaciones más comunes que aborda se incluyen:
- Depresión
- Ansiedad
- Problemas en las relaciones interpersonales
- Búsqueda de sentido e identidad
- Ansiedad existencial
El proceso de la Terapia Existencial
La estructura de la terapia existencial varía según las necesidades de cada persona. Las sesiones suelen durar entre 45 y 50 minutos y, por lo general, se realizan una vez por semana, aunque la frecuencia puede ajustarse en función del terapeuta y del paciente.
Se trata de un proceso individualizado, centrado en el crecimiento personal, y puede extenderse durante el tiempo necesario para que el paciente logre avances significativos en su bienestar.
Conceptos clave y técnicas en la Terapia Existencial
Aunque la terapia existencial no se basa en técnicas rígidas, emplea distintos conceptos y métodos para ayudar a los pacientes a explorar su mundo interior. Algunos de ellos son:
- Fenomenología: Comprender la experiencia subjetiva del paciente desde su propia perspectiva.
- Lenguaje no verbal: Observar el lenguaje corporal y otras señales no verbales para identificar emociones subyacentes.
- Análisis de los sueños: Explorar los sueños como una vía para comprender preocupaciones existenciales y aspectos inconscientes.
- Logoterapia: Ayudar al paciente a encontrar un propósito en su vida, incluso en medio del sufrimiento, según la teoría de Viktor Frankl.
- Análisis del Dasein: Inspirado en la filosofía de Heidegger, este enfoque enfatiza la relación de la persona con su existencia y su capacidad de ser.